Se desarrolló en una liguilla con tres partidos de ida y vuelta, celebrándose paralelamente el Campeonato Regional Centro de 2ª categoría, en el que participó el segundo equipo rojiblanco. En los dieciseisavos de final, el Athletic se emparejó con el CD Logroño, un equipo de Tercera División. En octubre de 1913, una vez solucionadas las diferencias entre la Unión Española de Clubes y la Federación Española de Fútbol (que se fusionaron creando la Real Federación Española de Fútbol), nació la Federación Regional de Centro, en la que el Athletic de Madrid pudo inscribirse como un club más, independiente de su homólogo bilbaíno.